PROFUNDIDAD DE LA BANDA DE RODADURA DE LOS NEUMÁTICOS

Los neumáticos siempre serán el factor determinante de contacto entre el vehículo y la superficie de la carretera. El funcionamiento óptimo de los neumáticos está íntimamente relacionado con la profundidad de la banda de rodadura.

En función de su tipo, la banda de rodadura de los neumáticos tiene una profundidad de entre 7 y 9,5 mm. Este valor garantiza el mejor rendimiento en condiciones variables. Aunque la profundidad mínima legal de la banda de rodadura para todos los neumáticos de turismos en Europa es de 1,6 mm, es más seguro sustituirlos cuando su profundidad alcanza un mínimo de 2 mm. Las consideraciones climatológicas establecen el límite de desgaste en 4 mm en los neumáticos de invierno. Los neumáticos de invierno con una banda de rodadura con menos de 4 mm de profundidad en principio dejan de ser neumáticos de invierno y, en algunos países, el límite de desgaste legal también se establece por ley.

La banda de rodadura del neumático incorpora un indicador de desgaste de la banda de rodadura (TWI) que muestra cuando un neumático se acerca al límite de desgaste.

Las superficies mojadas aumentan el riesgo de derrape. El riesgo de aquaplaning también aumenta a medida que se alcanza la profundidad mínima del dibujo de la banda de rodadura del neumático. Sin embargo, no se puede determinar la profundidad mínima del dibujo de la banda de rodadura con la que cualquier tipo de neumático puede conducirse con seguridad. En general, cuanto más ancho sea el neumático, mayor será el riesgo de aquaplaning con neumáticos desgastados. Para garantizar la máxima eficacia de sus neumáticos, le recomendamos que cambie los delanteros por los traseros y viceversa alrededor de la marca de 7500-10 000 kilómetros. No olvide ajustar la presión de inflado de los neumáticos a la nueva posición de montaje. Estas medidas aumentarán la vida útil de los neumáticos y mejorarán el confort de la conducción.